Reuderum

En el Reuderum, palabra que significa "sala del mago" se venden togas y armaduras, bastones, encatamientos, pociones y grimorios.
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Togas:

Túnica de mago principiante reforzada:
400 monedas
+ 1 a la defensa
+ 5 al maná
Armadura de mago

Túnica de mago principiante revestida:
500 monedas
+ 2 a la defensa
+ 5 al maná
Armadura de mago

Túnica de mago principiante acorazada:
800 monedas
+ 4 a la defensa
+ 5 al maná
Armadura de mago

Túnica de mago aprendiz:
700 monedas
+ 1 a la defensa
+ 10 al maná
Armadura de mago

Bastones:

Bastón de roble de fuego de principiante:
1000 monedas
+ 10 de daño por fuego
Tipo de bastón a dos manos

Bastón de hierro canalizador de sanación de principiante:
1400 monedas
+ 5 a sanación
Tipo de bastón a dos manos

Grimorios:

Bola de fuego básica:
200 monedas
Daño: 10
Maná: 5

Regeneración:
200 monedas
Salud recuperada: 10
Maná: 10

-entra a paso calmado y solo dice- Quisiera comprar dos grimorios y la mejor túnica con el dinero que sobre.... claro, si no es mucha molestia

El intendente observa que es de su misma raza y responde con elegancia y agrado, cogiendo una túnica de un armario y dos libros de una estantería:

- Aquí tenéis , serán ochocientas monedas.

-extiende la mano y deja caer la bolsa con monedas- espero que sean de buena calidad,eh? -coje los objetos-

- Los mejores de Amsfor con seguridad, no hay ningún otro lado donde conseguirlos.

- Entra a la tienda y se dirige hacia su compañero de raza- he encontrado este collar en una de mis "aventuras", por lo que puedo deducir no tiene aún ninguna magia aplicada en él, ¿ usted es capaz de encantar este artefacto?

- Sí, podría, pero eso gastaría energía de mi libro de energía pura arcana, y cuesta dinero conseguirla y tengo que comer...por lo que te lo dejo en...100 monedas.

- Creo que mejor precio no encontraré - le deja la bolsa de monedas en el mostrador- aquí teneís vuestras 100 monedas

- Venid dentro de media hora, y os daré un consejo, de quasari a quasari, salíd de esta ciudad y volved cuando los Teramor gobiernen, si os quedáis entenderéis el porqué.

- pasada la media hora,vuelve a entrar- parece que tienes algo que decirme... o algo que entregarme - mueve su cola hacia su espalda y se rasca con ella-

-Sí...y no...el encantamiento ha fallado y se ha perdido el amuleto, que, lo crea o no, tenía un valor muy superior a cualquier mío, sin embargo...le daré este bastón de fuego y un pequeño amuleto de salud como compensación.

- muchas gracias por vuestra... compensación... que os vaya bien en vuestros negocios - se retira caminando con su nuevo bastón-

Artadaxas llega rudamente con el sir bajo su brazo a el Reuderum. Cuando ve a ambos, el vendedor sujeta a el noble y se lo lleva a una habitación, y le dá a Artadaxas una potente poción de curación, que, apenas despues de tomársela, se cierran todas sus heridas definitivamente. Varias horas después salen el quasari y una persona increíblemente alta, vestido con una armadura dorada que le recubre el cuerpo hasta terminar en un enorme casco con una cresta de pelo dorado. Se lo saca y ve a un elfo con la piel mínimamente amarillenta, con el pelo dorado oscuro y una pequeña barba del mismo color junto con unos ojos casi completamente verdes oscuros.

- Sir Galendor, general superior de las fuerzas Teramor. Os debo mi vida. ¿Que queréis que haga por vos?- Pregunta al iniciado mago.

- Me siento profundamente halagado por vuestra amabilidad, solo me gustaría pedirle algún objeto que me ayude en mis aventuras para no terminar muerto, si no es mucha molestia.

- Venid mañana aquí, os estará esperando mi recompensa, y a tí, Vaaken, también tendrás tu regalo.

- vuelve 2 horas después del amanecer, abre la puerta y espera en el mostrador- ya he venido estimados.

- Has venido muy temprano, pero su regalo ha llegado antes, y perdona, pero le he hechado un vistazo, es un bastón...mira...mira- Dice, saca de un alargado cofre el bastón mágico y lo desenvuelve de la cuidadosa tela en la que estaba envuelto. Era dorado y en una ligera espiral, tenía varias garras y un cristal en el final del que salía magia visible, dando vueltas a su alrededor.