Vuelta a la situación

Artadaxas camina por el casco viejo y observa montones de ruinas y cadáveres de la guardia y la milicia de Amsfor, y ocasionalmente alguno de el Imperio Teramor, pero pronto llega a ver una torre y un muro derruido y a varios soldados de ambos bandos.

se acerca a la pelea y ayuda al bando del imperio Teramor

Artadaxas:
Salud: 60/60
Maná: 15/70
Daño estándar: 0
Defensa estándar: 1

Exta Teramor:
Vida: 10/130
Daño estandar: 6
Defensa estandar: 10

Excka Teramor:
Salud: 10/100
Daño estandar: 6
Defensa estandar: 6

Excka Teramor:
Salud: 6/100
Daño estandar: 6
Defensa estandar: 6


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Guardia:
Salud: 0/85
Daño estandar: 10
Defensa estandar:12


Guardia:
Salud: 0/85
Daño estandar: 10
Defensa estandar:12


Guardia:
Salud:34/85
Daño estandar: 10
Defensa estandar:12


Guardia:
Salud: 85/85
Daño estandar: 10
Defensa estandar:12


Guardia:
Salud: 85/85
Daño estandar: 10
Defensa estandar:12

Ante el peligro de morir, Artadaxas lanza una potente bla de fuego que derrumba una pequeña parte del muro y retrasa unos minutos la pelea. Coge a los moribundos Teramor y los guía sin rumbo por los callejones de el casco viejo.

Artadaxas los guía directamente hacia el único lugar en todo el mundo que tiene alguien de "confianza".La tienda donde compra todos sus artefactos mágicos además de encontrarse un excelente médico.

Caminan todos como pueden por las callejuelas y de vez en cuando ven a varios teramor luchando contra la guardia de la ciudad en ciertos puntos, más amenudamente cuando llegaban al centro de la ciudad, cuando llegaron a su destino, no observaron nada más que un contingente de guardias luchando contra varios teramor, que les arrinconaban dentro de un edificio en llamas, el Reuderum. Un teramor que acompañaba a Artadaxas se cayó al suelo y seguidamente los otros dos lo siguieron. El superior rebuscó entre su armadura y le dió una inscripción metálica ensangrentada y segundos después el resto hicieron lo mismo.

- Daselas a...- Intentó decir uno de ellos, pero apenas lo consiguió y murió. Artadaxas abandonó sus cuerpo y miró a su alrededor, donde había por lo menos media centena de cadáveres, la mayoría de los guardias. Los teramor estaban muy debilitados y empezaban a retroceder con mayores bajas, pero sonó un cuerno y un teramor montado en un caballo con una armadura negra dorada y blanca, un enorme escudo con una piedra que emitía un color ambarino y una montura con armadura del mismo material aparecieron en combate junto a un contigente de soldados variados, principalmente de bajo rango.

La batalla se tornó otra vez y definitivamente en contra de los guardias que apenas quedaron y huyeron desmoralizados para retirarse a la plaza principal, donde rendirían una última resistencia.

Al saber Artadaxas que entrometiéndose de nuevo perderá los tentáculos, se aleja de la escena lentamente con dirección a cualquier taberna de mala muerte, con la ironica sensación de comer pulpo horneado con especias de su patria...

Tras quedarse varios días en una posada cutre a las afueras de la ciudad, itentando alejarse de las luchas entre ambos bandos, pues se habían intensificado y había visto desde catapultas hasta enormes estructuras de los teramor que desconoce. Tras pasado un tiempo el sonido de los combates se desvanecen y Artadaxas sale al exterior, solo olor de cenizas y un montón de cadáveres y edificios derruidos. A medida que va entrando al centro de la ciudad y la plaza principal, donde hay un montón de cadáveres aún superior, tambien se vé a un montón de tropas teramor que descansan tras la lucha.